Especialidades / ANESTESIOLOGÍA
jueves, 28 noviembre, 2024
INFILTRACIÓN INTRAARTICULAR CON ÁCIDO HIALURÓNICO EN RODILLA
Constituye una parte natural del líquido sinovial, actúa en las articulaciones como lubricante y como efecto protector frente a la carga que soporta la articulación.
En los pacientes con artrosis se observa una disminución de la concentración de ácido hialurónico y de la viscosidad del líquido sinovial.
La administración intraarticular de ácido hialurónico exógeno puede, además de recuperar la viscosidad y elasticidad del líquido sinovial, disminuir el dolor y mejorar la movilidad de la articulación al actuar como lubricante para los cartílagos y ligamentos, a la vez que ejerce un efecto protector frente a las fuerzas mecánicas.
Indicaciones
Puede estar indicada en el tratamiento sintomático de la osteoartrosis leve a moderada de pequeñas y grandes articulaciones. También se puede utilizar tras una artroscopia para mejorar el dolor postoperatorio y mantener protegida la articulación.
Técnica
La técnica consiste en la inyección de ácido hialurónico dentro de la articulación. Para evitar infecciones, se realiza en condiciones de asepsia habituales: lavado de piel con solución antiséptica, guantes estériles,â& En algunas articulaciones, la infiltración se lleva a cabo guiada con imágenes de radioescopia, ecografía o por artroscopia quirúrgica.
Tras la inyección deberá mantenerse reposo durante 24-48 horas.
Complicaciones
La infiltración intraarticular de ácido hialurónico puede provocar, aunque en raras ocasiones, reacciones locales como enrojecimiento, prurito, edema y dolor. Sin embargo, es más frecuente un dolor leve transitorio secundario a la distensión de la cápsula de la articulación y que puede perdurar unos cuantos días después de la técnica.